martes, marzo 06, 2018

Perdón

Ese día venía de un momento horrible y aterrador. Venía del miedo y de la rabia. Leí en el tuiter tu disco, estaba en spotify, le di play con el volumen al máximo, pero esta vez no me salvó como los otros, ese disco no tenía nada para mi. Encontré el soundtrack perfecto para el vacío más ruin y solo sentí rabia.

Lo dije de la peor forma posible, de la forma más llena de rabia. No deseo que desaparezcas, nunca. Si supieras la consecuencia, si pudiera contarte que ese mismo instante pagué caro mi error. Está bien que haya sido así. La rabia siempre trae consecuencias terribles.

Estoy completamente convencida de que no hay nada incorrecto en que no te guste una cosa y en que si quieres, lo digas, pero esa no era la forma y por eso te pido perdón.

Tu has venido una sola vez al café y eso no te ha hecho mi enemigo. Asumo que no te gusta y he respetado eso.

Nunca hemos sido grandes amigos, nos hemos dicho poco (aunque estoy segura de que hemos sentido mucho), pero hace años que somos viejos amigos. Cada 28 de Febrero pienso en vos y en tu no cumple o en tu cumple numero 10 en un concierto que jamás voy a olvidar, pienso en el primer asiento en casi todos tus conciertos.

No puedo decir que has dejado de ser un gran músico, quizás soy yo y los lugares por los que me ha llevado la vida que han cambiado las cosas que me interesan.  Quizás es la rabia... quién sabe.

No quiero que desaparezcas. No quiero estar en el lugar de tus haters porque no te odio, no podría odiarte jamás. Prefiero quedarme aquí, al otro lado del rio, aquí donde no me escuchas ni me ves, aquí  donde te escucho cuando quiero, aquí donde no te veo aunque quiera.

Y desde aqui, grillo querido, te mando el abrazo más grande que tengo y todo el cariño del mundo.

Vero.

P.D. no soy facha, tampoco violenta.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Siempre sabes cómo decir las cosas, y cómo decir la verdad también.
Soy Claudia.

Vero Mendizabal dijo...

Hola mi amor ❤