domingo, noviembre 27, 2005

volviste a mi...

El sol ha salido hoy, de una manera un tanto arrogante creo yo, porque siento que esta salida de sol pretende anular de alguna manera las consecuencias de la tormenta de ayer… no anularlas, pero esconderlas, porque pienso, que sentido tiene este sol hoy para la gente que ha quedado en la calle gracias a la lluvia de ayer?… siento que era más honesto un día nublado, no lluvioso, pero por lo menos nublado, tal vez para que la gente afectada vaya sumiendo de a poco lo que les ha pasado…

Cuando alguien se va de nuestras vidas, existe una tristeza natural… una tristeza que necesita existir un tiempo, yo por lo menos, necesito sacarle el jugo a la tristeza, necesito afirmar que estoy triste con días sucesivamente tristes, solo así entiendo la magnitud de lo que me pasa, solo así comprendo que es real…necesito salir de ahí paso a paso y no es que yo quiera estar triste para siempre, pero tampoco quiero dejar de estarlo en ese momento, no quiero restarle importancia a mi tristeza… quiero que las cosas sigan un proceso, no que desaparezcan instantáneamente. No quiero que salga un sol radiante a pocas horas de una tormenta devastadora. Quiero que las nubes se vayan yendo de a poco.

Con este día insolentemente despejado vino a mi un recuerdo ya muy alejado… han pasado qué…14 años desde la durísima partida de un gran amigo mío, alguien a quien yo quise con toda el alma… recuerdo el día en que supe de su eterna ausencia, se me desplomó el mundo y no, en ese instante no quería volver a sonreír nunca más, pero recuerdo con exactitud que el día del funeral, otro amigo que teníamos me contó un chiste y me hizo reír… me sentí enojada conmigo y después con él, estaba furiosa... pensé, y por que me río? Porque no soy capaz de regalarle hoy mi tristeza absoluta? Acaso el punto final de esta gran amistad con Mauricio no es digno merecedor de una tristeza realmente entera?
si... el sol se asomó si permiso en un día que necesitaba estar nublado, que quería permanecer tapado por las nubes de esa nueva pero eterna ausencia..

11 comentarios:

Soñadora Insomne dijo...

Estás cosas de los dulos son tan raras...
Cuando mi padre se murió, lloré el momento en que me lo dijeron y el momento en que lo estaban enterrando. El funeral fue una esperiancia surreal para mí.
Estaba triste, pero sonreía todo el tiempo. Creía que él estaba bromeando, que lo único que había querido era reunir mucha gente para luego sentarse en el ataúd y decir: "cayeron".
Yo sonreía mucho, pensaba en lo absurdo de tanta gente para darle el "último adiós". Nunca se reunieron tantas personas, ni en los días felices...

Soñadora Insomne dijo...

Supongo que lo que trato de decir es que esas cosas a veces no tienen lógica y no se puede exigir tanto.
El mundo sigue girando y no le interesa tu dolor. El sol sale, descarado, las sonrisas escapan cojudas y la culpa toca a la puerta jodona.

Etrigan dijo...

como tu dices, es bueno sacarle el jugo a los momentos tristes, porque así aprecias más los momentos felices

Unknown dijo...

vivir la tristeza y llorar con todo es necesario, hasta imprescindible, pero quedarse en el llanto por mucho tiempo, nubla el sol
Besos

Unknown dijo...

Digestiones e indigestiones de emociones y sentimientos, lo cierto es que nada puede atravesarnos sin ser digerido, de cualquier forma que esto sea.
Hay un término que en esta lengua no conozco: 'to grieve' o 'faire son deuil' (las traducciones de los diccionarios no me convence), mi duda es:¿Este sentimiento está necesariamente asociado a la tristeza?

Vero Mendizabal dijo...

Sebas, que bien verte por acá...

supongo que no, digo, debe existir alguna asociación entre ese "to grieve" y la tristeza... pero no debe ser algo permanente, porque cuando alguien que amamos se va, ese "to grieve" debe durar mucho más que el sentimiento de tristeza... y nadie puede estar triste todo el tiempo, debe ser como la felicidad, tampoco dura siempre, ambos sentimientos se reflejan solamente en instantes...y si son costantes o permanentes deben estar asociados a la locura o a algúna cuestión patológica

creo los únicos que estan felices y tristes todo el tiempo y al mismo tiempo son los payasos, no???

Unknown dijo...

Gracias por la bienvenida, es un gusto.
Pues ahí podías abrir otro debate. Yo creo que hay una diferencia entre la felicidad y la alegría, y si esta diferencia existe sí creo que uno puede SER feliz pero no ESTAR alegre.
No conozco un término que sea para tristeza lo que alegría es para felicidad... pero creo que es ese el que buscamos, no?

Vero Mendizabal dijo...

sebas... tal vez la palabra que buscas es "angustia"... tal vez... seguiré pensando

fidelio dijo...

La ausencia es solo un estado mental. Es probable que mauricio aun siga vivo en tu corazon. Yo recuerdo los amigos que se fueron. No llore en su momento, pero si despues pense que estamos en mundos diferentes por un tiempo hasta llegar despues al otro lado.
Ahi se compensaran las deudas, mientras tanto, en honor a ellos, vivo como si fuera el ultimo de dia, y me levanto como si fuera el primero.

Vero Mendizabal dijo...

es cierto fidelio, la gente que se ha ido puede vivir siempre en nuestros corazones, pero a veces, y solo digo a veces, la ausencia se refleja en la falta de instantes, en la falta de su voz, de su risa, o de un café... el para mi tendra siempre 18 años, pero a veces intento imaginarlo con 32 ... que es la edad que tendría hoy.

y si, estoy de acuerdo, es en honor a ellos que es importante vivir cada día como si fuera el último, y sobre todo amar a la gente como si mañana no fueran a estar más con nosotros... porque tal vez ya no estén...

[i] Isabel La Fuente Taborga dijo...

la muerte es la única certeza con la que nacemos... nadie sabe que puede llegar a ser pero si sabe que se va a morir algun día, por mucho que intentes pensar que vivirás eternamente... es lo más irónico, porque a pesar de esa certeza vivimos imaginando un mundo de inmortalidades y nos sorprende que alguien se muera.. hoy me enteré que el papá de una amiga murió... y me quedé helada... sobretodo porque el que otro se muera me recuerda que yo y los que amo tampoco somos inmortales... y me da miedo... porque yo no sé vivir sin los mios... y si estoy convencida que el amor, el cariño es una suma de instantes, no pasa solo por las grandes cosas que vives con ellos, sino por las cosas simples, comunes, de todos los días... y si ellos se van, se van con ellos los instantes... y su ausencia, por más que vivan en nuestros corazones, irremediablemente es una ausencia de instantes... y eso es lo que uno extraña de ellos.. su risa... sus muecas... su acento... la forma de levantar la ceja cuando te mira... su olor... su voz... la forma en la que te abraza y la cálidez que sientes con ese abrazo... no extrañas los grandes discursos que dió, ni lo magistral de sus actos... por eso los seres que amamos son irremplazables... porque son únicos en nuestras vidas y nadie puede devolverte esos instantes que perdiste con su partida... por eso los extrañamos toda la vida.... pero si, yo también creo que se compensaran las deudas cuando estemos del otro lado.
y también me gusta disfrutar de las tristezas absolutas, me gusta que cuando lloro también este lloviendo en mi ciudad, que cuando rio el sol salga pleno... son canones, estándars que llevamos dentro, pero me gusta sentirme en conexion con la naturaleza e imaginar que al mundo entero le duele cuando a mi me esta doliendo... lo contrario me sabe a incongruencia.