martes, diciembre 17, 2024

Rayuela

Rayuela Café Arte: Una guarida para el alma

Hay lugares que se construyen con ladrillos, otros se levantan con sueños. Rayuela Café Arte es de los segundos. Nació de la necesidad de crear un espacio donde amigos distintos pudieran encontrarse, porque la amistad verdadera es eso: un vínculo que trasciende diferencias, que se celebra entre café, arte y complicidad.

Aquí, el tiempo parece detenerse. Rayuela es una guarida, un refugio donde todo está bien, donde el aroma del café boliviano recién hecho se mezcla con la música que nos pertenece: sonidos de autores nacionales que resuenan como una conversación íntima con el país mismo. Cada nota, cada melodía, le da voz a las historias que habitamos.

Las paredes de Rayuela están vivas. Son testigos de encuentros, sueños compartidos y silencios cómodos. Porque Rayuela no solo se visita: se habita. Es ese rincón donde el caos de afuera se queda en la puerta y donde el arte, en todas sus formas, nos recuerda que aún hay belleza en el mundo.

Si alguna vez buscas un lugar donde ser tú mismo, donde sentirte parte de algo más grande que el día a día, Rayuela Café Arte te espera. Porque aquí, todo está bien.


sábado, diciembre 14, 2024

Desapareciendo

A ratos pareciera que se me están acabando las palabras, o la forma de decirlas o la urgencia por decir algo.

Qué más puedo decir, nada de lo que he escrito me ha devuelto la vida que empecé y terminé un lunes cualquiera. No tan cualquiera, ese lunes yo le conté todo a ella, parecía feliz, no ha debido estar.

Es como nacer otra vez.

 Pero que maravilla!

Puedes verlo, es una experiencia visual. 

Qué hermosura lo que me cuentas!

No ha debido estar feliz. Se fue al día siguiente.

Los primeros días no podía dejar de escribir, me salían palabras por todos lados, sobre todo preguntas, Nunca respuestas. Preguntas para ella, que nunca se las dije a ella, las dejé escritas aquí.

Por qué así?

Por qué ahora?

Casi 10 años después?

Por qué no me di cuenta?

Me di cuenta después, ese mismo día en la tarde no solo no se alegró al verme, estaba emputada y yo me quede ahí, inmóvil, muda, de donde venía tanto enojo? Seguí con el día. 

Me di cuenta más tarde, cuando recordé ese beso de 6 segundos que no quiso darme. 

Me di cuenta otro día, cuando recordé el día de la puerta, el día que el estallido de la puerta me salvo de las cosas más difíciles que había escuchado de mi. 

Me di cuenta tarde, cuando recordé esas reacciones tan gigantes a nada, no dependía de nada, ahora lo sé , la rabia se había instalado y yo ya no tenía nada que ver. 

Y como hacemos? Te vas a dormir al otro cuarto? 

No, ya me he ido a un hotel, ya he sacado mis cosas 

Qué? Cuando? 

Hace rato, en la tarde, mientras vos planeabas el viaje

Por qué así? 

Ya no soportaba nada, los días se le habían hecho insoportables, y yo ahí, parada al frente, mirándola siempre tan enamorada, no me di cuenta. 

No podía pedirle que se quede, aunque seguro no se hubiera quedado, ese día recién entendí  lo harta que estaba. 

No ha pasado un día sin que hablemos al menos una vez al día. Nos vemos, vamos a conciertos, al teatro, a cenar, a almorzar. Me mira y sonríe, yo la miro y sonríe toda mi alma. Aunque un día me llevo a escoger el sillón para su nueva casa... Una casa que yo no voy a conocer, para que se siente la roomie ordinaria esa.  Ese día fue el más difícil despues del primero.  Ojalá no hubiera pasado. 

Tienes que alejarte Vero, contacto cero, be unreacheble, Vero, vas a sufrír más, así es más difícil Vero, no digas en voz alta que la amas, no le digas que la extrañas, Vero. No le regales flores, ni dibujos, ni cuadros, ni plantas, Vero. Sal. De ahí , vero, sal de ahí. 

No puedo, intento convencerme a mi misma, pero a mi misma no puedo mentirme, no puedo decirle que no, no quiero, si ella quiere verme el  Viernes, por ejemplo, yo digo que si, ya tengo la semana dibujada, lo que pase hasta el viernes solo es sobrevivir, facil. Aunque esta vez no hemos quedado en vernos, le he dado sus plantas, me ha dado la lámpara, se ha llevado todo, ahora si no queda mada. Seguro así será como se mete la distancia entre nosotras, quién iba a pensarlo, cómo podría haberlo imaginado yo. 

Los días siguen pasando, van desapareciendo las primeras veces, el primer cumpleaños del hijo, el primer viernes, el primer cumpleaños de ella, el primer domingo, los primeros nachos con queso, el primer café, la primera vez que cambio las sábanas. Va desapareciendo todo, las navidades, los años nuevos, los carnavales, va desapareciendo el segundo nieto, el tercero, la casa y el árbol y la hamaca y el café que nunca serán, porque van desapareciendo antes de existir siquiera.

10 años, van desapareciendo. 


martes, diciembre 03, 2024

Vivir en cero

Dejó todo.

Hace años que no me resfriaba. Ni así ni de otra manera. 

Dejó su gato, dejó al perro, dejó al hijo, dejó el sueño, dejó el compromiso. Dejó el aniversario. 

Dejó el vacío. 

Dejó el hueco.

Toso y siento todo, mi espalda, mi pecho, la desesperanza. 

Dejó todo pero de una manera bonita, sin gritos, sin enojos, sin lugar a reclamos.

Dejó todo y me dejó sin herramientas, me dejó con todos los problemas, me dejó sin razones, ni para enjoarme ni para dejar de amarla. 

Casi no duermo en las noches, me despierta la tos, me mantiene despierta la angustia 

Igual que el. 

Resultaron siendo lo mismo. Uno peor que el otro en ciertos momentos, uno mejor que otro en otros momentos.

Esa vez me dio neunonia, pasé un mes intentando que mi cuerpo no se muera. 

Me habla todos los días, dice que siempre vamos a estar cerca, dice que siempre va a estar para mi, nos vemos cada vez que ella quiere, casi nunca cuando quiero yo.

Me dieron de alta un domingo por la tarde, con el sol radiante, ajeno el sol  a la oscuridad de mi alma. 

Ojalá me dejara verla los domingos, a veces si me deja , otras veces elige a una amiga. Ojalá me dejara verla cuando necesito respirar.

Me duele la cabeza, seguro  por el resfrío, no recuerdo bien los síntomas, hace mucho que no me resfriaba, ni así, ni de otra manera. 


Olor a gas

Me atraviesan los pensamientos más oscuros, los más temibles, los inimaginables.

El perro se mea en la sala a pesar de todos mis esfuerzos y de todas las palizas.

Su gato grita, nunca sé que quiere. 

Mi hijo llora desesperado, no consigue el aire mínimo para dejar de llorar. 

Mi papá se acerca por su propios medios al alivio que nos promete la muerte. 

Ha desaparecido mi vida, atrás no hay nada, adelante, solo bruma y hoy, hoy me atraviesan los pensamientos más oscuros, los más temibles, los inimaginables. 



lunes, diciembre 02, 2024

El último aliento de un perro

Ayer vi morir a un perro, era un cachorro que corría desaforado jugando con sus amigos perros adultos y de pronto lo pisó un taxi.

Me baje del auto, me paré cerca de el para ver si podía ayudarlo, pero no, unos segundos después, lloró y dio su último respiro, ahí, tan cerca de mi. 

Anoche vi como la vida se va, un segundo la emoción no te deja medir el peligro, al segundo siguiente lo único que te queda es un último respiro.

Volvi al auto y pensé en mis hijos, pensé en mi amor, en mis hermanos, en mis amigos.

La vida es apenas un destello. 



Siempre fue el mar

Mi vida se ha transformado en algo súper raro, no reconozco los días, mi casa,  Rayuela, todo es ajeno, hasta yo misma, mis formas de dejarme hacer cosas, veo la crueldad del egoísmo y no me muevo, estoy inmóvil en algo que verdaderamente no entiendo. 

Siento cosas que no había sentido nunca, me hago demasiadas preguntas que sé que no tienen respuesta.

Ella se fue, ella decidió todo sola, yo no sabia ni quisiera que ella estaba sacando sus cosas de nuestra casa. Habían señales, claro, cuando pasó todo recién pude verlas, que rabia la que tenia ella, cuánto resentimiento por un tiempo que ya no existe... 

Primero he juntado todas sus fotos en una carpeta, todas, se las he pasado todas y las he borrado de mi teléfono, he borrado las fotos de su papá, de sus hermanas, de sus hijos y de su nieto. Cada vez que las encuentro, me invade una tristeza que no puedo manejar, entonces, mejor dejo de mirar. 

Estoy aprendiendo a dormir en toda la cama, me gusta fumar sin molestar a nadie, a veces me duermo con las luces y la tele encendidas, a veces con todo apagado. He puesto plantas en todas partes. Me despierto temprano y me levanto inmediatamente para no extrañar sus besos

Me ha sorprendido mucho la sensación física de la angustia. Como cuando caes en un hueco profundo, pero todo pasa por dentro y de pronto entiendes que el alivio esta en el mar.

Siempre fue el mar, la salida.