miércoles, abril 06, 2011

A veces yo se cosas de mi

Ahora se de mi que no me gustan las tardes, menos las tardes con sol. Sé que las sillas sobre la mesa y el olor a cera me dan la sensación de angustia y de encierro.
Entiendo que es la música de los 80´s la que no me gusta, porque que me recuerda en cada nota el tiempo en que fui niña, al tiempo en que mis miedos eran más grandes de lo que podía entender, una etapa en la que no pude descifrar esa sensación de vacío 10 minutos antes de almorzar
Sé de mí que los feriados me dejan la sensación de un mundo en pausa en un momento en que lo último que quiero son pausas en mi vida.
Sé de mi que el mejor café es ese de la mañana, ese que llega en el frio de las primeras horas, cuando las mesas del café están casi todas vacías y cuando el sudoku me espera intacto y sin intentos fracasados de otros.
EL mejor cigarro es ese que aparece después de una búsqueda intensa en los escondites que yo misma he destinado para ellos.
Sé de mí que un gran momento es cuando lleno mi tanque de gasolina y cuando mi auto brilla por donde te atrevas a mirar, mi refugio listo para llevarme al primer lugar que apunte el mapa que llevo en el asiento del pasajero.
Hoy he descubierto  esa sensación de “segunda oportunidad” que me dan todos  los cuadernos con hojas blancas que después voy coleccionando en una caja que guarda todas mis sensaciones
Mis miedos son literalmente chicos, son los enanos los que me enfrían la columna, más sin son enanos viejos, mucho más si son viejas, con las manos arrugadas y torcidas, con las venas que parecen alambres, con los dedos con forma de alicate, y los ojos, me aterran los ojos de las viejas enanas que me fulminan con el diminuto brillo que apenas logra salir por las arrugas que hace mucho han tapado casi todo.
Los enojos ajenos, que no son tan ajenos en realidad, pero que no son enojos míos, los enojos de los que yo amo, de los que un día hicieron que todo esté bien con un abrazo. Más miedo me da si esos enojos se pintan eternos, si parece que superan todo lo que ha quedado registrado en los tiempos pasados.
Sé que aunque quiera nunca podré sentir pasión por el futbol ni por las carreras, sé que no voy a leer jamás un libro que no quiera leer, ni aunque sea con orden judicial
Hoy se todo eso de mi, estoy segura que si me vuelvo a sentar dos horas sin poder resolver mi sudoku voy a saber mucho más, pero con esto que se hoy está todo bien